Daniel Passerini  “En Córdoba se ayuda, no se maltrata”

Por todo esto, fue enfático al decir que “la ciudad va a ser un obrador a cielo abierto” y que en Córdoba “el Estado ayuda y no maltrata a los discapacitados, los jubilados, los docentes”. Prometió que no habrá más naranjitas en el Parque Sarmiento. Pero fue cauto al referirse a los cambios en el Transporte Urbano. Tampoco dejó olvidar la deuda legada de los radicales y reperfilada cuando fue intendente Llaryora. “Este año pagaremos dos cuotas de 50 millones de dólares” enfatizó.

Passerini lució sonriente toda la jornada y exacerbó su empatía. Al final de su alocución, cuando adelantó los proyectos para que el Concejo Deliberante lo debata, giró la cabeza y se dirigió, nombrándolo, al viceintendente y titular del cuerpo, Javier Pretto. Aplaudido ante cada anuncio, agradeció la presencia de dirigentes de los centros vecinales.  

En su discurso enfatizó la diferencia con el gobierno nacional. No es para menos. La quita del Fondo Compensador del Interior, donde las provincias se repartían el dinero, obligó a cambiar todos los planes que tenía Passerini cuando triunfó para intendente. Sin plata para el transporte más el aumento de los costos operativos, el 2024 fue un tiempo de afrontar el temporal. 

Casi a los gritos, en uno de los momentos más intensos, manifestó que “no maltratamos a las personas que tienen una enfermedad” e invocó al Papa: “Francisco dice que estando cerca de quien sufre se aprende a creer” para enviar una salutación para la recuperación del Pontífice, haciendo aplaudir a todo el auditorio. En ese momento Anti-Milei, Passerini sostuvo que en “Córdoba, el Estado ayuda” y “la casta no son los docentes, las personas con discapacidad, las personas enfermas, jubiladas” porque preferimos estar con “los feriantes, las fundaciones, las cooperativas, las organizaciones de la sociedad civil” Passerini sacó pecho y señaló que en la ciudad la deserción escolar es cero y la matrícula crece. 

No hizo grandes anuncios sobre el transporte urbano. Simplemente dijo que no quiere repetir malas experiencias y solo anunció que la tarjeta SUBE se incorporará al pago del boleto como así también se colocarán validadoras que permitirá el uso de otros medios de pago. “Vamos a ampliar para que más vecinos puedan viajar en ómnibus” No se refirió a los temas que los propios vecinos reclaman: la reducción de las frecuencias y la seguridad en las paradas en los barrios. Un detalle no menor por tanta euforia contenida: la SUBE significa un acceso al subsidio y cuando la instalación de las validadoras se terminen de colocar de 40 por día en las mil unidades, aproximadamente, los usuarios se podrán registrar en el esquema nacional de beneficios para acceder al 55% de subsidio por viaje. Cabe agregar que en el nuevo sistema jugará un rol clave el Banco de Córdoba como administradora de los recursos del sistema urbano.

Passerini puntualizó cada anuncio en el área de seguridad, admitiendo indirectamente que es un tema que lo alcanza políticamente. Dijo que durante el año pasado desmantelaron 72 fiestas clandestinas y elogió a la Guardia Urbana de 400 agentes y 70 móviles. Anunció que se colocarán 223 domos y 396 cámaras de seguridad que vigilarán los 98 centros de educativos, los cien centros de salud y los 25 espacios verdes que administra el municipio.

Eso sí, jugando con la época (y con los electores) señaló que “los delincuentes tienen que estar en la cárcel” y “los vecinos de bien tienen que disfrutar el derecho a la vida en la ciudad”